Finding cinderella (Hopeless #2,5), Colleen Hoover

17.1.14

FINDING CINDERELLA
Colleen Hoover
105 páginas
Atria Books

En Losing Hope fuimos testigos de una breve historia contada por Daniel, el mejor amigo de Holder, donde narra una historia en la que una chiquilla entra llorando al cuarto de limpieza, donde él se ocultaba durante el quinto periodo, y luego de una charla habían sucumbido una buena sesión de besos. Pasa una semana y la joven vuelve, pero esta vez es la ultima que se va.


Creo que esto se sitúa un año después de Hopeless, luego de que Six regresa de Italia. Daniel entra al cuarto de Sky buscando a Holder, y cuando lo ve entrar seguido de una chica rubia siente que tiene una nueva conquista. Sky la presenta como su mejor amiga Six, y antes de que comiencen las miradas coquetas, Holder la prohíbe, por ser la mejor amiga de su novia y de él mismo. Sin embargo cuando la nombra fuera de sus limites, el deseo de Daniel por conocerla no hace más que aumentar.



Comienzan una especie de relación secreta, después de una cita secreta, en un lugar no tan secreto.

En algún punto de la historia ambos se reconocen como sus antiguos amantes de una hora y las reacciones me dejaron bastante ¡Plop!

—Esto es aterrador —susurra—. Nunca he tenido un novio. No sé cómo funciona esto. ¿Las personas se vuelven exclusivas así de rápido? ¿Se supone que pretendamos que no estamos interesados durante algunas citas más? Oh, Dios mío. Nunca me había excitado por una chica reclamándome como suyo.
Sinceramente, con la serie Hopeless no he parado de llevarme sorpresas. Termino el primero y resulta que tiene una continuación: Aun no publicada. Cuando consigo leer el segundo, por casualidad me entero de que le sigue un tercero y con nada menos que la historia de Daniel y Six, y sinceramente después de esto me pregunté si existiría alguna historia de Brekin o Val, pero eso ya sería pedir demasiado.

Cuando Daniel narra esta historia en Losing Hope tuve el breve presentimiento de que Cenicienta era un seudónimo para la chica ruda de la serie, quien no había tenido demasiado protagonismo. Entonces, ¡BANG!, Me encuentro con esta historia y mis sospechas se confirman y doy saltos de alegría. Como no lo encontré hace mucho, ayer acabo de comenzarlo y terminarlo, luego de casi tres meses de haber leído Losing Hope, pero al fin, lo leí.

Daniel es como Brekin pero no mormón, (a su manera), resulta ser tierno, carismático y con un sentido del humor liviano y muy parecido al de Six, así que rápidamente los queremos ver juntos.

Six por otro lado, bueno, ya la conocen. Su lado femenino está bastante alejado de ser femenino y tiene ese algo de chica ruda inodiable... En fin.

Nuestro narrador es... (redoble de tambores...) ¡Daniel! Con su extraña y única forma de ver las cosas que resulta muy cómicas.

Basta de reír, la historia no es totalmente color de rosa, y cuando por fin cae la bomba quedé bastante cerca del recogimiento que, estoy segura, muchos sintieron leyendo los dos libros anteriores.

Esta historia es más corta apenas llegando a superar las cien paginas, pero el trabajo se ve. Admiro a Colleen y su capacidad de hacer novelas de amor, que a veces bordean lo dramático. Muy pocos autores logran hacer una novela de genero romántico sin tentarse por el conocido cliché, que muchas veces reclama mi atención y me mantiene pegado a la historia, pero al final me doy cuenta de la perdida de tiempo (algunas veces) que fue, y (volviendo al tema) está autora definitivamente logró la hazaña. Con esto abarco la serie completa, no solo está historia corta.

Sin importar la calificación que les de, o opiniones negativas de otros blogs, ustedes simplemente, tienen, no, DEBEN, leerla.. Por otro lado, la serie, merece la calificación completa.

1 comentario:

  1. Holas! Te acabo de nominar a tu blog a los Liebster Award y te dejo la entrada. Te sigo. Besos. Gaby
    http://loscuerposconducenalmar.blogspot.com.ar/2014/01/nominada-liebster-award.html

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«Pues considero que aquella persona, caballero o señora, que no sabe apreciar el valor de una buena novela es completamente necio» Mr. Tilney.